La falta de deseo sexual no es una característica únicamente femenina
Si bien los estudios de disfunciones sexuales generalmente se enfocan en los problemas específicos de cada género: la baja libido en las mujeres y el rendimiento sexual en los hombres, se ha descubierto recientemente que la falta de deseo sexual está afectando a uno de cuatro hombres, de acuerdo a un informe realizado en el 2012 por la Sociedad Internacional de Medicina Sexual.
¿Por qué se apaga la libido en los hombres?
Las causas de la pérdida del deseo sexual tanto en los hombres jóvenes como en la tercera edad pueden agruparse en tres categorías:
Causas psicológicas del bajo deseo sexual
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El estrés
El exceso de trabajo, algunos problemas en la casa o por la cantidad de actividades que se deben realizar en la vida diaria puede afectar la vida sexual de los hombres. El estrés y la ansiedad no solo pueden provocar la disfunción eréctil sino que también disminuyen el apetito sexual de las personas afectadas.
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La depresión
La depresión puede provocar que los hombres que se encuentran tanto en la temprana edad como en la tercera edad pierdan el interés en el sexo, ya que se produce una tristeza generalizada y una gran apatía frente a muchas actividades de la vida diaria.
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Los problemas con la imagen corporal
Si bien los problemas con respecto a la imagen corporal generalmente están asociados al universo femenino, estos también pueden afectar a los hombres. El exceso de peso, la calvicie o los efectos que produce el envejecimiento natural en el cuerpo pueden hacer que la persona no se encuentre a gusto con su aspecto físico, lo que lleva a que el deseo sexual se vea reprimido.
Causas físicas de una baja libido masculina
Existen determinados problemas físicos que pueden tener su incidencia en el comportamiento sexual de los hombres. Entre ellos se destacan:
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Los problemas hormonales
La testosterona es la hormona del deseo sexual por excelencia, tanto en los hombres como en las mujeres. Es por ello que los bajos niveles de testosterona tienen un impacto significativo en la inhibición del deseo sexual. Los niveles de esta hormona disminuyen naturalmente entre los ancianos pero estos también pueden descender debido a enfermedades crónicas, a determinados medicamentos o al uso de drogas. A modo de ejemplo, algunos tratamientos médicos contra la pérdida de pelo requieren el uso de determinados medicamentos, como la finasterida, que afectan negativamente la libido.
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La tiroides
Algunos problemas de la tiroides, como el hipotiroidismo, no solo provocan que se apague el deseo sino que también pueden generar impotencia.
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La vasectomía
Si bien no existen estudios que demuestran que una vasectomía tiene consecuencias en el deseo sexual de los hombres, hay muchos que afirman que sienten una reducción en la intensidad de sus orgasmos; aunque probablemente esto se deba a una reacción psicológica frente a la intervención. Sin embargo, existen muchos que afirman tener un deseo sexual bajo, luego de realizado el procedimiento.
Algunas enfermedades que pueden generar un deseo sexual reprimido
Existen algunas enfermedades que pueden provocar que se apague el deseo sexual, entre ellas es posible citar como ejemplo los problemas cardíacos, la diabetes y la alta tensión sanguínea. Por otra parte, el alto consumo de alimentos procesados y el sedentarismo, que son algunas de las causas de la obesidad, también afectan en el bienestar general de las personas, lo que repercute directamente en su vida sexual.
¿Es normal que el deseo sexual se encuentre inhibido en la tercera edad?
A pesar de que es natural que los hombres perciban una disminución en la libido a medida en que envejecen, existen muchas personas que continúan manteniendo una vida sexual activa durante la tercera edad y ,por ende, la falta de deseo puede deberse a otras causas.
En conclusión, es importante estar atento a las posibles causas del deseo sexual disminuido ya que estas no solo se pueden corregir a través de algunos tratamientos sino que pueden estar indicando alguna enfermedad subyacente que se puede prevenir y curar a tiempo.