Tomado de: http://columnazero.com/
Heteroflexibles. No es un concepto que nos hayamos inventado, ni mucho menos. Así se define a los hombres hetero que tienen relaciones sexuales con otros hombres, tan seguros de su condición sexual y de su identidad que no dudan en aventurarse en lo desconocido para experimentar nuevas sensaciones.
Al contrario de lo que algunos puedan creer, no es nada raro encontrarse con esta situación en nuestra sociedad. Con el paso de los años, la aceptación de la sexualidad de las personas se ha vuelto algo normal, al menos para el grueso de la población, y cada vez es más común que aquellos que se sienten atraídas por otros del mismo sexo, expresen su amor y vivan su vida con total libertad, como debe ser.
Sin embargo, en el caso de los denominados “heteroflexibles” o “heterocuriosos”, estamos hablando de hombres que exploran su sexualidad sin poner en duda su orientación, siguiendo con su vida de hetero después de un encuentro de este tipo. Además, para los expertos es la cosa más normal del mundo, pues sostienen que no es lo mismo orientación que sexualidad. Y esto no es nada nuevo.
Psicólogos y sexólogos han intentado dar respuesta a las causas que llevan a un heterosexual a estas prácticas, y todos coinciden en que pueden ser diversas. Algunos simplemente se limitan a probar, lo que los entendidos denominan el explorador sexual, aquellos a quienes les gusta probar cosas nuevas sin tener por ello que cambiar nada en su vida.
Entre las motivaciones también citan el desencanto con las mujeres. Después de algunas rupturas, el hombre puede llegar a pensar que solo se va a entender con otro hombre, que el raciocinio de las mujeres no está a su alcance y que será imposible llegar a congeniar con alguna. Y buscan ese afecto en personas de su mismo sexo. Lo que pasa, según los expertos, es que como los hombres somos, por lo general, más dados a expresar nuestros sentimientos con los genitales que con el corazón, pues es más sencillo recurrir al sexo que a unas palabras de ánimo.
Otro de los motivos que resaltan los especialistas es el efecto narcisista que, según ellos, predomina en los gimnasios. Lucir un cuerpo bonito y que se fijen en ellos, despertar la admiración de los demás sin importar que proceda de mujeres u hombres. También están aquellos que, privados de sexo con mujeres durante mucho tiempo, recurren a otros hombres para calmar su necesidad.
Ante todo, los expertos sostienen que mientras esta situación no atormente de ninguna manera al hombre, no hay ningún tipo de problema. Si estos encuentros no suponen un conflicto, sino que se ve como algo esporádico y normal, la intervención de los expertos sobra.
Sergio del Pino
Enlace original: http://columnazero.com/heteroflexibilidad-la-curiosidad-del-hetero/
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